martes, 7 de julio de 2009

Is he living or is he dead?

Sobre Fiódor Dostoievski:
"El 28 de enero de 1881, moría. A esas alturas era el escritor más admirado de Rusia y se había convertido en un auténtico referente espiritual para muchos."

El Talón de Aquiles, César Vidal
Me recuerda mucho una historia de Mark Twain, (ni idea del título de la adaptación en castellano, en inglés "Is he living or is he dead?"; sería algo así como "¿Está vivo o está muerto?") y no precisamente por similar, sino por diferente.
"Well, then, by way of preamble I will ask you to note this fact in human history: that the merit of many a great artist has never been acknowledged until after he was starved and dead."

"Bueno, entonces, como preámbulo te pediré que te des cuenta de este hecho de la historia de la humanidad: que el mérito de muchos de los grandes artistas nunca fue reconocido hasta después de que murieran de hambre."
(Traducción libre, lo sé, pero ese es el principal mensaje.)
Este es un extracto de la historia en la cual un grupo de jóvenes artistas decide simular la muerte de uno de ellos para así conseguir reconocimiento, y dinero. Me chocó mucho, a pesar de ser tan obvio. De hecho, es lo que me abstiene (entre otras cosas, que quede claro) de dedicarme a la preciosa labor artística antes de conseguir una formación reconocible que pueda darme de comer, cosa que tenía clara desde que por primera vez cogí papel, ceras y lápiz (léase: desde siempre).

Y siguiendo yo mi interés, casi obsesión, por relacionar mentalmente todo tipo de acontecimientos, se me encendió una bombilla cuando coincidió esta frase que tan grabada tengo en la mente, la lectura del libro en el que se menciona a Dostoievski y el funeral del Rey del Pop.

¿Quién no conoce, aunque sea por encima, la vida de Vincent van Gogh? Hijo de un pastor metodista, es de relativamente gran conocimiento que durante su vida permaneció en la pobreza. Ahora es considerados uno de los grandes pintores de la historia del arte, autor de cuadros geniales, de los archiconocidos girasoles y de obras fantásticas como la que introduce esta entrada; pinturas llenas de fuerza, emoción y color. Pero nadie se lo dijo mientras vivió.

No obstante, a Dostoievski, al parecer, sí se lo dijeron. ¿Qué tuvo el escritor moscovita que no tuviera el gran pintor? Fueron contemporáneos, pero vivieron en dos mundos completamente distintos. Van Gogh vivió en una Europa relativamente libre, mientras que Dostoievski experimentó en su propia piel la represión zarista cuando fue deportado a Siberia y a punto de ser fusilado por supuesta conspiración contra Nicolás I.

Aunque la acusación por conspiración fue una confusión, añadió existencialismo y, sobre todo, crudeza a sus palabras. Nada mejor que un Crimen y Castigo o unos Hermanos Karamázov para aquella situación social y económica: análisis de la complejidad del alma humana en plena miseria campesina y despotismo del zar. Desde luego había mucha más posibilidad de que las masas se sintieran identificadas con aquello que con un paisaje de ensueño o con flores reproducidas con una técnica impecable. De todas formas, la principal característica del arte es su atemporalidad: tanto como la literatura como el espejo de la sociedad como la pintura, eran, son, y serán arte. Tal vez la primera fuera más inmediata y proporcionase más reconocimiento en su momento que la segunda, pero tanto Dostoievski como van Gogh eran, son y serán artistas.

"Las obras maestras del arte tienen a los ricos por esposos, pero a los pobres por amantes."

Nada más cierto. Claro que no significa que los ricos no tengan ni idea de arte, pero sí que las masas son lo que proporcionan ese dichoso reconocimiento. Si no fuera por ellas, los grandes conaisseurs no tendrían ni idea de que existe alguien allí.

Sin embargo, en estos días, son los medios de comunicación los que promocionan personajes que creen ser artistas. En estos días, los artistas son más valiosos y más escasos que los diamantes, porque ahora uno no puede identificarlos: el pseudoarte es igual de archiconocido (basta con más de una semana en los 40 principales) y todo lo que es conocido pretende ser llamado arte. Pero sólo los artistas que realmente lo son, permanecerán para siempre.

Y creo que Michael Jackson es uno de ellos.
Porque cosas como éstas, pocas.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Sabes Justyna, he leido tus artículos y dejáme felicitarte
veo, por la forma en que escribes que ers una persona muy reflexiva y más aún culta, lo que me sorprende, siempre he pensado que esas cosas no dependen de la edad pero no lo había visto "materializado"... ^^
Buen artículo,
saludos...

la Justyna dijo...

Muchas gracias por la palabras bonitas, pero no sé yo...

Reflexiva soy y mucho, tengo la obsesión de liarlo todo y sacar conclusiones totalmente absurdas como luego me dicen algunos, pero esa es mi debilidad: poner en conexión lo poco que sé.

Que esa es otra: ¿culta? sé poco, y lo poco que sé igual es mentira, yo que sé. ¿Qué puedo saber a mis dieciseis años? No lo sabré ni cuando me muera...

Por lo menos esto es una forma de reflexionar libremente sin tener la obligación de ponerlo todo tan formal, que muchas veces condiciona el resultado...

Pero de todas formas, muchas gracias, esas cosas siempre animan :)

Emetorr1714 dijo...

Te he visto entrar en el blog de Elvira y de momento solo quiero decirte que se está de maravilla.
Luego con mas tiempo chafardearé sin permiso por tu casa, pero ya he visto con el rabillo del ojo a Dostoievski y ya veo que iremos bien.

Saludos cordiales de bienvenida

Oigres Led Séver dijo...

No digas que buscar un nexo de unión entre tus conocimientos es un fallo, porque enhorabuena, ves la telaraña.