lunes, 25 de agosto de 2008

acho, pues porque la fanta de limón lo vale

Después de todas las paranoias que me he podido montar durante mi corta vida, está la de Drikin Fanta.

No sé de dónde la he sacado. Lo más probable es que haya sido de algún precioso spot televisivo, de esos que me gustan tanto y hacen que ni encienda la tele, pero que me acuerde de una puñetera frase mientras esté pensando en un nombre coherente para mi blog y que hace que mi madre compre Fanta de limón a pesar de que yo la odie. Es lo que llamamos el siglo XXI. Prefiero ni imaginarme el XXII.

Emepecemos por que la Fanta es un refresco (lo que los de la isla llaman soft-drink) con sabor supuestamente a fruta. Está la de naranja, de color naranja y que sabe a azúcar con un poco de piel de naranja, y la de limón, de color amarillo con sabor a limón de plástico. Sí, esos limones con los que yo solía jugar cuando era pequeña y me quemaba porque eran demasiado grandes para las Barbies. Limones de plástico gigantes modificados genéticamente del todiavía siglo XX. (La llegada del XXI me hizo dejar las Barbies y ponerme a ver el Telediario)

Y al parecer yo debería vivir en Japón. Por lo menos allí el camarero no me vendría con la pregunta que siempre sigue a la expresión "Una Fanta, por favor". ¿Por qué? Porque en la isla nipona no se comercializa la Fanta Limón (debido a su poco éxito). Lo que sí hay son los sabores de naranja y uva. Sí que son listos los japoneses, sí.

Bueno, pero a lo que al origen se refiere, ya que estay hablando de la Fanta en general, durante la 2ª Guerra Mundial, cuando el amigo Hitler, la bebida fue obtenida originalmente de subproductos de la producción del queso y del jamón. (sin comentarios)

Pues bien, tras este shock bien explicable (aunque veces es curioso saber estas cosas), citemos a la Wikipedia, el paraíso de los alumnos gandules:

" Los ingredientes de la variedad tradicional de naranja son: agua carbonatada, azúcares, 8% (7% en Portugal, 10% en Argentina) de jugo de naranja, acidulante E-330, aromatizantes, conservante E-211, antioxidante E-300, estabilizante E-412 y colorante E-160a. "

¿Por qué será que no pone nada sobre mi queridísima Fanta Limón? Lo dejo en puntos suspensivos...

Además nosedonde leí que según los científicos de la Universidad de nosedonde los Doritos y la Fanta son los posibles culpables de la hiperactividad en los niños. Porque llevan el conservante mencionado anteriormente. Culpa del siglo XXI y del capitalismo!

Y por último: este exquisito refresco también está en versiones no menos originales - como pepino y chicle. Es lo que tiene permanecer a la Coca-Cola Company.